24 de enero de 2023, Alejandro R. Chavez
(Este artículo se difundió originalmente el 16 de diciembre de 2022)
Mientras que la COVID-19 aceleró la adopción de hábitos de compra digitales durante 2020 y 2021, a lo largo de 2022 ha sido la inflación el fenómeno que más ha afectado cómo gastan su dinero los mexicanos. En el cierre del año, los datos indican que el alza de precios está limitando de forma severa las opciones de los consumidores en el país, llevándolos a tomar decisiones más conscientes.
Según datos de YouGov Profiles, el porcentaje de mexicanos que están dispuestos a pagar extra por un producto de calidad se ha reducido consistentemente desde 2020, el año que inició la crisis sanitaria. Entonces, el 63% de la población aseguraba que no le importaba gastar más por un bien de calidad superior. Pero en pleno 2022, la cantidad de personas en México que aún están de acuerdo con la idea es ahora de apenas 56%.
Esta evolución es visible en todos los rangos socioeconómicos. Es cierto que los encuestados de ingresos medios y altos aún están más dispuestos a gastar más por un producto de mayor calidad que una persona de ingresos bajos. Pero también es una realidad que, en estos rangos salariales superiores, el porcentaje de personas dispuestas a pagar ese premium se ha reducido notoria y consistentemente desde 2020.
YouGov define a las personas de ingresos bajos como aquellas que ganan menos del 75% del salario promedio nacional. Las de ingresos medios son quienes ganan entre 75% y 200% de la remuneración media en el país, mientras que los de ingresos altos serían quienes ganan más del 200%.
Hay otros indicadores que también sugieren que los consumidores en todos los niveles socioeconómicos están preocupándose menos por la calidad y más por el precio. En 2020, el 54% de la población general de México aseguraba que no compraba en supermercados que no tuvieran productos frescos y de calidad.
Pero en pleno 2022, esta cifra ha caído a 43%, una reducción de más del 10%. En el recorte por niveles, encontramos que entre los mexicanos de altos ingresos, el porcentaje pasó del 56 al 49% entre 2020 y 2022; mientras que entre los consumidores de medianos ingresos la cifra disminuyó del 57% al 47%. Entre la población de bajos ingresos, el número cayó del 53 al 42%.
También se ha visto una aparente evolución negativa en la frecuencia con que los mexicanos deciden realizar gastos de placer. En todos los rangos de ingreso, el porcentaje de personas que admitían ocasionalmente gastar más en cosas innecesarias rozaba el 60% a finales de 2020. En 2021, la cifra estaba mucho más cerca de la mitad de la población. Ahora, en todos los sub-sectores económicos es menos de la mitad de los mexicanos quienes admiten hacer compras de placer.
Sin embargo, no todas son malas noticias para el sector de consumo. Hay algunas señales de esperanza y ciertos hábitos que podrían abrir oportunidades interesantes para las empresas que sepan aprovechar este momento único del mercado.
Por ejemplo, el gusto por las compras en línea que se solidificó durante la pandemia continúa reforzándose. Para 2020, sólo el 33% de la población general decía que prefería comprar cosas en línea que en tiendas tradicionales. Dos años después, ese porcentaje escaló al56%, y es especialmente alto entre los consumidores de medianos y altos ingresos (62% y 63%, respectivamente); aunque el ecommerce también ha casi duplicado su atractivo entre los mexicanos de menores ingresos (pues la cifra para este segmento pasó del 33 al 56% entre 2020 y 2022).
Otro comportamiento interesante de la época post-COVID y de alta inflación es la nueva flexibilidad que tienen los consumidores al ir de compras. Datos de Profiles sugieren que en 2022 el 60% de los mexicanos tuvo un presupuesto muy estricto a la hora de gastar, una reducción sustancial frente al 66% que había expresado lo mismo hace dos años.
Lo anterior sugiere que, ante un ambiente de precios al alza, los consumidores mexicanos tienen que mantener su mente abierta y no casarse con un único presupuesto al hacer las compras, para sacar así el mayor provecho de sus ingresos. Para aquellas marcas que sepan demostrar una buena relación de calidad y precio, ésta podría ser una oportunidad inigualable a futuro.
De cualquier manera, sí es importante señalar que los mexicanos de menores ingresos siguen siendo los más afectados por el entorno de precios crecientes. Según datos de Profiles, el 57% de los consumidores en este rango socioeconómico asegura que cuando hace sus mandados solo compra lo que necesita. La cifra es la más alta de todos los rangos de ingresos y representa una diferencia estadísticamente significativa respecto del 54% del promedio nacional que opina igual.
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Foto por Tim Mossholder
Metodología
YouGov Profiles se basa en datos recolectados continuamente a través de encuestas recurrentes, en lugar de usar un único cuestionario de tiempo limitado. Los datos de Profiles para México son representativos de la población urbana y están estadísticamente ajustados a edad, género, educación, región y etnicidad. Aprenda más de Profiles.